Rahsaan Roland Kirk, además de ser uno de las figuras más controvertidas de la historia del jazz, fue un soplador como la copa de un pino. No sólo tocaba de miedo el saxo tenor, sino que ideó un modelo de respiración circular que le permitía tocar a la vez varios instrumentos. No acaba aquí la cosa porque, aparte de la variedad de saxos que tocaba, incorporaba, colgados en su cuello a modo de collarín, instrumentos tan poco ortodoxos como el silbato de nariz, el piccolo o híbridos como el trumpófono (una trompeta con boquilla de saxo soprano) o el slidesofón (un pequeño trombón con boquilla igualmente de saxofón). Así de especial era este personaje en cuyo repertorio cabía desde música de Nueva Orleans a lsoul, pasando por el hard bop y el free. Todo un loco del jazz, pero como suele pasar con casi todos los locos, también un genio. Por cierto, Rahsaan Patterson se llama así por él. Mola, ¿no?
