Geri Allen es una de mis damas predilectas del jazz realizado en los últimos veinte años y una de las grandes pianistas, objetivamente hablando, del género. Este año, en marzo para ser más exactos, ya se quitó esa espinita que llevaba clavada de no haber grabado nunca un disco a piano solo con su maravilloso "Flying Toward The Sound" por lo que ya no me esperaba disco de ella hasta, al menos, 2011. Pero cual fue mi sorpresa cuando en junio ví que sacaba nueva propuesta al mercado, un peculiar trabajo en directo (primera ocasión también en la que publica un directo) denominado simplemente "Live" a secas.

Seguramente, de esto que os comento, os llame la atención el término peculiar. Entenderéis enseguida a lo que me refiero cuando os diga que se trata de un disco en formato cuarteto piano (Geri Allen), contrabajo (Kenny Davis), batería (Kassa Overall) y percusión procedente de...¡un bailarín de claqué! (Maurice Chestnut). Así las cosas, dos pensamientos, a priori contradictorios, se pueden venir a la cabeza con este hecho: el primero es que la parte gráfica del asunto, es decir, el poder visualizar los bailes de Chestnut se pierde en formato CD, no así, claro está, en DVD. Por otro lado, me parece un formato más que interesante y, sobre todo, muy refrescante dada la originalidad que desprende la idea. De todos modos, cuando uno pone a girar este álbum en su reproductor tiene la sensación de estar ante un trabajo en trío con puntuales aportaciones de las  chispeantes suelas de Chestnut, las cuales protagonizan algún atractivo duelo con el no menos prometedor Kassa Overall, uno de esos jóvenes valores negros del instrumento que parecen incorporar a su jazzismo, patrones hip-hop y funk. Por lo demás, estamos ante un disco potentísimo con una Allen hambrienta en todo momento en sus desarrollos arropada por feroces riffs de bajo llevados a cabo a la perfección por Kenny Davis y por los golpes de un Overall que, seguramente, a partir de ahora, veremos en más de una grabación acompañando a otros grandes músicos. En cuanto al repertorio, tenemos de todo, originales de la propia Allen como el apabullante "Philly Joe" que abre el elepé o "In Appreciation", en homenaje a Rosa Parks así como versiones de temas de Charlie Parker ("Ah Leu Cha") o McCoy Tyner ("Four By Five") además de un sobrecogedor "Loverman" que úne con el archiconocido "Embraceable You" de George Gershwin. En fin, que vaya dos discos que se ha cascado la Allen en tan sólo tres meses. Esto es música de primera calidad y, junto con la última maravilla de Jason Moran, creo que puede estar en lo más alto del podio de los mejores trabajos a finales de año. Veremos si alguien lo supera en esta segunda mitad de 2010. Difícil lo tienen, la verdad.