Sin ser la mejor técnicamente ni un dechado de potencia, Billie Holiday se convirtió en la mejor voz femenina del Jazz de todos los tiempos. Ya desde sus comienzos a mediados de los años treinta se intuía su grandeza e incluso cuando su voz llegó a estar dañada por todos los abusos que practicó en vida, siguió transmitiendo ese Blues innato que corría por sus venas. Todos sus seguidores estamos de enhorabuena con la publicación de una caja de tres discos que incluye canciones míticas de la cantante desde sus comienzos hasta mediados/finales de su carrera: “Solitude”, “Strange Fruit”, “I Cover The Waterfront”, “My Man”… En definitiva, un gran repaso cronológico a la vida artística de Lady Day.

Reseña publicada en el número 3 de la revista Soul Nation.

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