Hace poco me hice eco por aquí de la reedición de las grabaciones completas de Catalyst, una de las bandas puntales de los años setenta en la fusión del soul, el funk y el jazz espiritual. En ese momento había cerrado el grifo hasta el próximo mes en cuanto a compras se refiere pero, al ver esta reedición, no pude aguantarme y decidí hacer un esfuerzo. La ocasión no era para menos. Después de los descatalogadísimos álbumes de la banda y de la también perdida recopilación que el sello 32 Jazz sacó en 1999, el sello Porter nos brindaba la oportunidad, a muchos de los seguidores de esta formación de Philadelphia, de conseguir sus míticas grabaciones en tan sólo dos entregas. El primer volumen de estas Complete Recordings engloba sus dos primeros álbumes, es decir, su homónimo "Catalyst" y "Percepcion", ambos fechados en 1972. El núcleo de la banda en esta época estaba formado por Eddie Green (teclados, vocales), Sherman Ferguson (batería, percusión, marimba), Odean Pope (saxos, flauta, oboe) y Alphonso Johnson (bajo). Éste último abandonaría la banda tras su marcha, primero con Chuck Mangione y posteriormente a los Weather Report de Joe Zawinul y Wayne Shorter, siendo sustituído por Tyrone Brown. Asimismo, multitud de musicazos de sesión procedentes de la escena Philly se sumaban puntualmente a las grabaciones de Catalyst. Por ahí están presentes también el grandísimo Norman Harris en la guitarra, Larry Washington en las congas, Ron Baker y Anthony Jackson en los bajos o Billy Hart en las percusiones. Todos ellos conjuntados hacen que escuchar esta música sea una experiencia casi divina y cercana al éxtasis donde el jazz eléctrico de bandas de la época como los mencionados Weather Report o la propia formación del enchufado Miles Davis se funde con síncopas funk , plasmadas en la explosiva rítmica que forman, sobre todo, Alphonso Johnson y Sherman Ferguson, a través de referencias avant-garde y modales tomadas del jazz espiritual que tanto se practicaba por aquel entonces al modo Strata East y de la música de John Coltrane. Cabe destacar, por otro lado, la labor de un Odean Pope soberbio en los saxos, flautas y oboes con unos desarrollos plenos de fuerza y personalidad y un Eddie Green excelso, sobre todo en el rhodes. Con todos estos datos, huelga señalar que estamos ante una música maravillosa, casi insuperable diría yo y, aunque con ciertos rasgos free, muy sencilla (aunque contenga en el fondo una gran complejidad) de escuchar para neófitos interesados en esto de la Great Black Music. Una banda, estos Catalyst, de esas que marcan época. Sólo se me ocurre una cosa para acabar: qué razón tenía 32 Jazz cuando subtituló su recopilación de 1999 como "The Funkiest Band You Never Heard". Lo clavaron.