Artículo publicado en la web de Jazzitis:
Quizá el sonido particularísimo de este pianista era inevitable: no se trata del clásico músico que supo desde muy joven que se dedicaría a esto (para el la música es un fruto tardío, y no empezó a tocar el piano hasta los 18 años), ni es el clásico jazzman que escucha también otros estilos: Gilchrist creció, como tantos otros jóvenes en Washington D.C., impregnado de los sonidos que transitaban las calles de su barrio, y descubrió el jazz mucho después. Prince, rhythm&blues, soul, funk, rap, hip hop, go-go… vivía cerca del llamado padrino del go-go, Chuck Brown, y escuchaba embelesado, desde la acera, los sonidos que salían del local donde aquel ensayaba. Así que no es de extrañar que de su música rebose un sentido rítmico tan rudo y rotundo. Por Ricardo Arribas.
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