Estaba esperando impacientemente que un día, al llegar del trabajo, este disco estuviera en mi buzón y eso es exactamente lo que ocurrió anteayer, sólo que en vez de en el buzón, lo tenía la portera de mi edificio que debe pensar, a estas alturas, que tengo alguna enfermedad rara que consista en pedir paquetitos, pero bueno, eso es otro cantar. El caso es que, para estrenar mi cadena nueva, no se me ocurría un disco mejor que este "Silver Pony", última entrega de una de mis debilidades personales, Cassandra Wilson y su banda. Se trata de una colección de directos grabados aquí en España, concretamente en Sevilla y Granada, y Varsovia, intercalados con temas llevados a cabo en estudio. La formación que la acompaña es su habitual, es decir, la compuesta por Marvin Sewell en la guitarra, Jonathan Batiste en el piano, Reginald Veal en el bajo, Herlin Riley en la batería y Lekan Babalola en la percusión con la añadidura de Ravi Coltrane en el cuarto corte y de John Legend (últimamente hiperactivo) en la última pista, la versión del "Watch The Sunrise" de los Big Star. Por lo demás, "Silver Pony" nos trae lo que ya es costumbre en el repertorio de Cassandra Wilson, un mestizaje de sonidos y géneros que van desde estandars de jazz (los espeluznantes “Lover Come Back to Me” y "St. James Infirmary"), hasta llegar a alguna versión soul ("If It’s Magic" de Stevie Wonder), pasando por el blues de la mano del "Saddle Up My Pony" de Charley Patton y gotitas de pop (el "Blackbird" de Lennon y McCartney) y de música brasileña con la estremecedora versión del "Manha De Carnaval" de Luiz Bonfá aquí llamada "A Day In The Life Of A Fool". Centrándonos en el apartado netamente musical, tenemos por un lado la maravillosa y siempre cálida y sugerente voz de una Cassandra que, con poquísimas notas, dice muchísimo más que mil Beyoncés cantando al unísono, con sus insoportables gorgoritos incluídos. Por otro, una banda de la que me declaro auténtico fanático con un Marvin Sewell que ya solo por la introducción que se marca en el mencionado "Saddle Up My Pony" ya merece un monumento, vaya riffs, vaya solos y vaya arreglos que se marca el angelito. A destacar también el trabajo realizado por un Reginald Veal en el bajo y el siempre eficiente Herlin Riley en las baquetas, membranas y platillos. "Silver Pony" es un trabajo que destila excelencia por los cuatro costados. Un manual de Great Black Music que repasa, exitosamente, temas clave en la historia de la música negra con una banda que puede etiquetarse, sin ningún género de dudas, como una de las grandes formaciones de esta primera década de siglo XXI y su líder, Cassandra Wilson, una de las embajadoras más destacadas y esenciales de nuestra música. He dicho.
Saddle Up My Pony
Went Down To St. James Infirmary